Cuando una persona acude a una institución a solicitar un crédito para comprar una casa, la entidad financiera realiza un perfilamiento del cliente para saber si este cumple con los requisitos para ser acreedor al préstamo y si cuenta con la solvencia financiera para realizar los pagos de manera puntual, sin comprometer sus finanzas.
Cuando las personas están interesadas en comprar una casa, la mayoría de ellas no cuenta con recursos financieros propios para poder hacerlo, es por ello que deben solicitar el apoyo de un crédito hipotecario. En muchas ocasiones sucede que las personas no saben en qué consiste contratar un crédito, qué tipos de créditos existen, los plazos para pagarlo, los impuestos que incluye, qué requisitos se necesitan, qué instituciones pueden otorgar créditos, etcétera.
Empecemos por saber qué es un crédito. Un crédito es un préstamo que otorga un banco u otra institución financiera a todas las personas o empresas que necesitan adquirir un bien inmueble, mismo que se quedará en garantía (es decir, hipotecado) hasta que ese préstamo sea liquidado al 100%. Por lo tanto, y como medida para salvaguardar dicha propiedad, el contratante está obligado a adquirir un seguro contra daños, un seguro de hogar y un seguro de vida.
Los plazos para liquidarlo serán establecidos por la institución que otorga el crédito de acuerdo con las finanzas y el perfil del cliente, y estos van desde 5, 10, 15, 20 y hasta 30 años. Además, los créditos hipotecarios son deducibles de impuestos.
Hay bancos dispuestos a financiar el 90% del valor de un inmueble, pero si se trata de un crédito cofinanciado (es decir, que participan dos instituciones financieras), pueden otorgar hasta el 100% del valor de la propiedad.
Algunos documentos necesarios para solicitarlo son: presentar una solicitud de crédito, identificación oficial, comprobante de domicilio, CURP, RFC, comprobante de ingresos y una constancia de situación fiscal. Es importante consultar con la institución financiera los requisitos.
El solicitante debe saber que destinará el 30% de sus ingresos para el pago del crédito, durante el tiempo que este dure, por ello, debe comprobar que cuenta con la capacidad de pago suficiente para hacerlo y que esta inversión no se convertirá en un problema de sobreendeudamiento. Algunas instituciones ya incluyen en el pago del crédito, gastos extra como el avalúo y servicios notariales.
Además, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), también pone a disposición de quienes buscan un crédito hipotecario, una herramienta que permite revisar las condiciones y costos de los diversos productos que ofrecen los bancos.
Es importante contar con un presupuesto, para que sea más fácil definir el tipo de producto que se adapte al solicitante, determinar los plazos y los montos (con intereses) que se deberán pagar, los gastos extra como el enganche, los gastos notariales y los seguros e intereses durante el tiempo que dure el crédito.
Además, es muy importante considerar tres puntos: que la tasa de interés sea la más baja, que sea una tasa fija, así como el tiempo (plazo) en el que se pagará el préstamo.
Para tomar una decisión inteligente, que brinde estabilidad y seguridad, tanto al inmueble como a las finanzas del cliente, este puede buscar la asesoría y experiencia de un bróker o asesor hipotecario, pues ellos son especialistas en créditos, gestión, trámites, productos hipotecarios y tipos de financiamiento, además de actuar como intermediarios entre el cliente y las instituciones financieras. También brindan orientación para saber cuál crédito se adapta mejor a las necesidades y perfil mediante un comparativo, y pueden asesorar para elegir la institución financiera más conveniente.
Generalmente asumimos que las instituciones financieras le otorgan créditos a todas las personas que los solicitan, pero no es así. Para ello, las instituciones realizan un “perfilamiento del cliente”, que consiste en recopilar información con el propósito de conocer al que será su cliente-comprador, su nivel de ingresos, situación laboral, si tiene ahorros, su edad, estado civil, medios de contacto, etc., para seleccionar a los candidatos correctos.
Estos son los principales puntos que los asesores inmobiliarios necesitan para conformar el perfilamiento del cliente ante una posible operación de compra-venta de un inmueble:
Gastos notariales: es el pago que deberá realizar el solicitante ante la notaría, que incluye los impuestos y derechos sobre la propiedad, así como los honorarios del notario. Los gastos notariales se calculan sobre el valor más alto del inmueble. Durante la compra-venta de una casa, se llevan a cabo 3 actos jurídicos:
3. Contrato de Hipoteca: donde la garantía de pago es el inmueble, en caso de incumplimiento del crédito.
A los derechohabientes del INFONAVIT o FOVISSSTE, su ahorro de la Subcuenta de Vivienda les permite potenciar su enganche o llegar a cubrir los gastos iniciales, a través de los productos Cofinavit y en el FOVISSSTE a través de Aliados Plus y Respaldados.
Cofinanciamiento: tipo de crédito donde se combina el préstamo de una entidad financiera privada (Banco o SOFOM) y un organismo de gobierno (INFONAVIT o FOVISSSTE) para aportar en conjunto los recursos para comprar una casa terminada. Los recursos provenientes del INFONAVIT y del FOVISSSTE están formados por dos fuentes: préstamo de la entidad (que es menor al préstamo de un crédito directo), más el ahorro de la subcuenta de vivienda a lo largo de la vida laboral del trabajador.
En el caso de los bancos, al momento de que un cliente solicita un crédito hipotecario, la probabilidad de que le sea otorgado dependerá en gran medida de su perfil de riesgo hipotecario, ya que cada entidad puede exigir condiciones más o menos flexibles. El principal aspecto que se tomará en cuenta para otorgar un financiamiento hipotecario será la capacidad del cliente para solventar el préstamo y los gastos que de él deriven, pero en general, los aspectos que deberá tomar en cuenta para realizar el perfilamiento del cliente y tomar la decisión de otorgar o negar el crédito son:
Historial de crédito: la única manera que un banco o entidad financiera tiene para saber si un cliente es buen pagador, si se atrasa o simplemente ha dejado de pagar un crédito es consultando el Buró de Crédito, por ello es importante tener un buen comportamiento crediticio. Todo esto indicará que se trata de una persona responsable para pagar sus préstamos.
Esta información es de carácter confidencial y será utilizada por los brókers o asesores y las instituciones financieras para definir si el solicitante es candidato a recibir un crédito, calcular el monto que le será asignado, así como las condiciones de pago. Así que, para que su solicitud no sea rechazada, deben convertirse en “el prospecto ideal”.
Si quieres saber si tu perfil te da la oportunidad de solicitar un crédito hipotecario, en HU Lifestyle nuestros asesores pueden ayudarte y brindarte la mejor orientación.